La Plataforma en Defensa de lo Público (PLADEPU), como manifestamos desde hace más de 4 años en Quiénes somos, lo formamos un grupo de trabajadores de la Junta de Castilla y León independientes e implicados en el reconocimiento y la dignificación de los empleados públicos, en lucha constante contra corrupciones y privatizaciones, y comprometidos en que la defensa de los servicios públicos redunde en una mejor calidad y atención a los ciudadanos.
Respetando las ideas políticas, sindicales, religiosas, económicas, sociales y culturales que pueda tener cada trabajador, ante la convocatoria de elecciones sindicales para el próximo 3 de marzo animamos a que la participación del empleado público sea consciente y más exigente con los sindicatos porque son nuestros representantes institucionales.
Es necesario que los sindicatos que salgan de las urnas el 3 de marzo de 2016 se involucren en la defensa de lo público, denunciando las externalizaciones que se han realizado y se siguen realizando, porque, además de resultar finalmente siempre más caro, se precariza el empleo y se usurpan funciones reservadas al ámbito de lo público, ámbito que exige la neutralidad e imparcialidad necesaria para garantizar la independencia en la prestación de servicios.
Es imprescindible acabar con la Administración “B” paralela, donde no se dan las condiciones de acceso a sus puestos bajo los principios de igualdad, mérito y capacidad, permitiendo que se contraten a amigos y familiares con el dinero de todos, y porque favorece la corrupción al no someterse a los mismos controles que tiene la Administración. Los sindicatos mayoritarios han consentido, hasta la fecha, la creación de estas empresas “garrapatas” sin haber hecho la oposición que correspondía, sin apreciar que la mejor manera de proteger el empleo y a los empleados es defender lo público, porque en lo público esta lo que es de todos y al que todos pueden acceder con las mismas oportunidades y en las mismas condiciones.
También la ausencia de una mesa sectorial de función pública pone en peligro la defensa de los intereses de los empleados públicos de esta Comunidad. Por lo que instamos a todos aquellos que participen en estas elecciones que exijan a sus sindicatos la constitución de dicha mesa.
Igualmente denunciamos que si los sindicatos no exigen a la Junta la anulación inmediata de las encomiendas de gestión vigentes en todas las Consejerías y Organismos Autónomos, el trabajo del funcionario público peligra, la imparcialidad en la gestión de los servicios públicos peligra. Es esencial abordarlo y exigirlo antes de cualquier reforma de las RPT´s. De lo contrario estamos vendidos.
Desaprobamos a aquellos sindicatos que comprometen la real defensa de lo público con prebendas como formación, liberados, y que en el momento de la verdad se ven condicionados por las subvenciones que se les asigna para aceptar las migajas que la Junta les propone. Sí valoramos la labor de sus trabajadores sindicales de base, su trabajo en la defensa de los derechos individuales de los empleados, pero las decisiones finales de sus cúpulas no rematan la defensa de lo público de forma contundente. Afortunadamente hay también sindicalistas que, aun con medios más limitados, defienden con coherencia y rigor lo público.
Recomendamos la lectura del artículo de BurgosDigital ¿Por qué son importantes las elecciones a representantes sindicales en la Administración autonómica?
Respetando las ideas políticas, sindicales, religiosas, económicas, sociales y culturales que pueda tener cada trabajador, ante la convocatoria de elecciones sindicales para el próximo 3 de marzo animamos a que la participación del empleado público sea consciente y más exigente con los sindicatos porque son nuestros representantes institucionales.
Es necesario que los sindicatos que salgan de las urnas el 3 de marzo de 2016 se involucren en la defensa de lo público, denunciando las externalizaciones que se han realizado y se siguen realizando, porque, además de resultar finalmente siempre más caro, se precariza el empleo y se usurpan funciones reservadas al ámbito de lo público, ámbito que exige la neutralidad e imparcialidad necesaria para garantizar la independencia en la prestación de servicios.
Es imprescindible acabar con la Administración “B” paralela, donde no se dan las condiciones de acceso a sus puestos bajo los principios de igualdad, mérito y capacidad, permitiendo que se contraten a amigos y familiares con el dinero de todos, y porque favorece la corrupción al no someterse a los mismos controles que tiene la Administración. Los sindicatos mayoritarios han consentido, hasta la fecha, la creación de estas empresas “garrapatas” sin haber hecho la oposición que correspondía, sin apreciar que la mejor manera de proteger el empleo y a los empleados es defender lo público, porque en lo público esta lo que es de todos y al que todos pueden acceder con las mismas oportunidades y en las mismas condiciones.
También la ausencia de una mesa sectorial de función pública pone en peligro la defensa de los intereses de los empleados públicos de esta Comunidad. Por lo que instamos a todos aquellos que participen en estas elecciones que exijan a sus sindicatos la constitución de dicha mesa.
Igualmente denunciamos que si los sindicatos no exigen a la Junta la anulación inmediata de las encomiendas de gestión vigentes en todas las Consejerías y Organismos Autónomos, el trabajo del funcionario público peligra, la imparcialidad en la gestión de los servicios públicos peligra. Es esencial abordarlo y exigirlo antes de cualquier reforma de las RPT´s. De lo contrario estamos vendidos.
Desaprobamos a aquellos sindicatos que comprometen la real defensa de lo público con prebendas como formación, liberados, y que en el momento de la verdad se ven condicionados por las subvenciones que se les asigna para aceptar las migajas que la Junta les propone. Sí valoramos la labor de sus trabajadores sindicales de base, su trabajo en la defensa de los derechos individuales de los empleados, pero las decisiones finales de sus cúpulas no rematan la defensa de lo público de forma contundente. Afortunadamente hay también sindicalistas que, aun con medios más limitados, defienden con coherencia y rigor lo público.
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